Route Irish era el nombre que recibía el tramo más peligroso de las vías de Irak durante la ocupación de los aliados occidentales, era la ruta entre la Zona Verde y el aeropuerto de Bagdad. La trama empieza con el funeral de un mercenario que murió en acción en esa ruta. Un amigo del muerto no cree la versión de la compañía y se dedica a investigar lo que pasó en realidad. Es una película de guerra con buenas dosis de acción e intriga, pero va más allá. También es una película con un gran contenido político que, a diferencia de otras del género, explora las implicaciones de las actividades y el nivel de responsabilidad de las compañías privadas de defensa que usan mercenarios en los conflictos recientes. Una entretenida denuncia del neocolonialismo occidental, nominada a la Palma de Oro en Cannes.