Cualquier fanático de la ciencia ficción se sentirá atraído por una película como esta, con gran presupuesto y actores famosos. Pero la historia es decepcionante por falta de originalidad y porque es desarrollada de una forma poco creíble. Unos astronautas encuentran una forma de vida que de un ser microscópico evoluciona en un par de días en un monstruo que empieza a matarlos uno por uno. Hay momentos de tensión pero no se llega a sentir la amenazante sensación de miedo que tiene Alien. Por el contrario, es mas bien predecible y la criatura en cuestión parece una mata de sábila diabólica, pero no asusta. Tal vez lo único bueno es el final, que deja la opción abierta para una segunda parte que tendría un mejor potencial que Life. La película no es mala pero no cumple con las expectativas para un público exigente. De todas maneras sirve para pasar el rato.