Vi esta película sin muchas expectativas, solo porque ha ganado un montón de premios. Básicamente se trata de un romance, entre un chico y una chica que están conectados de una extraña forma aunque no se conocen, son muy diferentes y viven lejos uno del otro. En un principio parece que la cosa no pasa de ahí, pero el desarrollo de la película se hace profundo e intrincado. Es una historia seria que invita a reflexionar y que plantea como la vida está hecha de pequeños momentos trascendentes. Visualmente cada escena es una pequeña joya sincronizada perfectamente con una banda sonora genial y todo inmerso en la cultura japonesa. Es difícil explicarla, toca verla para sentir de primera mano de qué se trata y porqué es casi hipnótica. Imperdible.